Crash es una película estadounidense producida por Lions Gate Films y dirigida por Paul Haggis en el año 2004. Haggis es también uno de sus dos guionistas, junto con Robert Moresco. Cuenta con la participación de un extenso cuerpo de conocidos actores, entre los cuales destacan Sandra Bullock, Don Cheadle, Matt Dillon, Brendan Frazer y Jennifer Esposito.
Género cinematográfico: Drama/Racismo. Historias cruzadas.
Duración: 115 minutos
Fotografía: James Muro
Música: Mark Isham
Estreno en EE.UU: 6 de mayo de 2005
Sinopsis de la trama: a partir del descubrimiento del cuerpo de un hombre, brutalmente asesinado y abandonado en una cuneta de la ciudad de Los Ángeles, la vida de varias personas se entrecruzan sin causa aparente. Un flashback al inicio del film muestra los resultados de toda la acción de la trama, que transcurre en un período de 36 horas. A la vez que se desarrolla esta trama central coexisten hilos narrativos secundarios que ayudan a comprender el significado de la historia principal, vista también desde las diferentes perspectivas de los personajes.
Las piezas van encajando en la estructura del relato a modo de collage. Racismo, xenofobia, corrupción, abuso de poder, religión, estereotipos étnicos, culturales y sociales… son algunas de las tensiones que ilustran la caótica vida de los habitantes de la gran urbe norteamericana y quedan reflejadas en el film.
Siguiendo la propuesta de Machado (2009), no es una narración lineal sino que presenta diferentes recorridos en forma de microhistorias que, sin relación aparente inicial, se van entrelazando. El punto de arranque o primer hilo conductor son los accidentes de los personajes, cuyas vidas se presentan de forma independiente sin nexo de unión entre ellas. Ello permite un alto grado de interactividad con el espectador, favorecida por el uso del flashback y los saltos temporales (hacia atrás) que conducen a la elaboración de recorridos por parte del espectador. Las historias no se abordan de forma individual, puesto que muestran la relación del personaje con su pareja y la evolución que ambos sufren, tanto con un resultado positivo (continuidad) como negativo (ruptura y formación de nueva historia). Por lo tanto, otro hilo conductor es la evolución o el cambio biográfico, entendido como proceso de crecimiento personal.
Otro aspecto destacable es el recurso a la voz fuera de plano como manera de dirigirnos a la siguiente historia y el papel de énfasis dramático provocado por la utilización de la música en determinadas secuencias.
Finalmente, el uso de la técnica del campo/contracampo ayuda a que el espectador se convierta en un voyeur desasosegado ante los giros asombrosos, vueltas y contravueltas de las complicadas historias paralelas presentadas.
Referencia bibliográfica:
Machado, A. (2009). El Sujeto en la Pantalla. La aventura del espectador, del deseo a la acción. Barcelona: Gedisa Ediciones.
Web oficial: http://www.crashfilm.com
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